Contact Improvisation – Ray Chung visitó la Facultad de Artes

Fotografía del taller realizado por Ray Chung en la que se puede ver participantes parados frente a frente, con los brazos estirados y sus palmas haciendo contacto con las palmas de la persona que tienen enfrente.

El pasado 9 de abril de 2024 el docente e investigador Ray Chung, especializado en la práctica del Contact Improvisation, brindó una charla en la Facultad de Artes. Participaron del evento estudiantes y docentes, tanto de nuestra facultad como de CFE y ENFAS.

Las gestiones para la realización de este encuentro estuvieron a cargo de la Unidad Académica Estudios del Cuerpo de la Licenciatura en Danza Contemporánea (Instituto de Artes Escénicas) y la Unidad Académica de Formación y Apoyo Docente (UFAD) de Facultad de Artes.

El evento despertó gran interés, y contó con un número significativo de participantes. En el comienzo se dio una charla abierta en la que el docente respondió preguntas del público, centradas en la historia de la Improvisación en Contacto y su experiencia de más de 40 años.

Ray Chung, como referente ineludible en la historia y activación contemporánea de la danza, destacó durante la charla el gran valor que encuentra en la práctica del movimiento auténtico, ya que permite el espacio y el tiempo para la expresión. Mencionó al inconsciente y su rol relevante como fuente de creatividad.

Consultado por los conocimientos que pone en juego a la hora de desarrollar estas prácticas, Chung explicó, que todas las experiencias influyen en la forma en que las personas aprenden, en el qué y en el cómo aprenden, incluso en la forma de estar en el mundo y de vivir. Por eso, estimula a las personas a estar abiertas a la información que pueda venir de distintas áreas, aun si no son las áreas vinculadas con su interés principal. El investigador puso como ejemplo la pertinencia que tiene la economía, y lo que pasa a nivel geopolítico, en relación con su propio movimiento en el baile. Además, dijo que encuentra en la naturaleza una fuente muy grande de inspiración y que la improvisación de contacto es un modo de volver a estar en contacto con ella. El Contact es muy animalístico y eso también tiene que ver con las relaciones entre personas. “Somos animales además de humanos, para mí es importante mantenerme conectado con esa fuente de la naturaleza. Me dejo inspirar por cómo distintos animales se mueven o interactúan”.

Sobre la transformación de la comunidad Contact a lo largo de los años, mencionó que en los inicios el estilo era más rústico, luego la práctica fue progresando, y los encuentros con los cuerpos comenzaron a ser más fluidos. Los movimientos fluidos son una muy buena manera de encontrarse con los otros cuerpos, de entender el Momentum.

Sobre el Contact como terapia, dijo estar de acuerdo con ese abordaje, porque la base es esencialmente comunicación física entre seres humanos. Tiene elementos como la confianza (cuando le das el peso a alguien), la escucha, el dar soporte y apoyo, que son elementos compartidos con otras prácticas como puede ser la psicología. Dijo conocer a muchos practicantes de Contact que lo usan en sus prácticas terapéuticas. Pero el Contact no es solo para procesos terapéuticos, es también para el arte, y la creación. Comentó, además, que ha sido descrito también como deporte artístico, por lo que se puede llegar a él desde diversas perspectivas.

Recordó que en los inicios, junto a Steve Paxton (conocido como el padre del Contact Improvisation) y otros integrantes de ese grupo de investigación, buscaban no colocar esta práctica en estructuras muy rígidas, sino crear una especie de “carcasa vacía” o marco de trabajo, en el que se pudiera introducir en él eso que es interesante para cada persona.

Sobre el final de la ronda de preguntas, Chung fue consultado sobre el simple toque, a lo que respondió que el toque “no es tan simple” y para explicar qué tan simple puede ser, compartió una cita del libro Las políticas del toque de Erin Manning (2007)

“Tocar, cada acto de alcanzar, permite la creación de mundos, esta producción es relacional. Me estiro para tocarte, para inventar una relación que a la vez me inventará a mi”.

La jornada finalizó con un espacio de reflexión y acción, en el que los conceptos de su relato fueron potenciados por medio de una práctica a través de la indagación del movimiento personal y colectivo.

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